http://www.ciclistas.org/racusa/indice.htm
Un grupo de viejos amigos, decidimos recorrerlo en bicicleta de montaña y he aquí el diario de la travesía, aliñado con algunos retazos de las historias y de las leyendas, que jalonan este ancestral Camino de las Estrellas...
Salimos de Barcelona a las 10 de la mañana para llegar a Burguete a eso de las 6 de la tarde, para evitar que el equipo de apoyo tenga que madrugar mañana, subimos en coche al alto de Ibañeta, inicio de nuestro camino, para bajar en bicicleta hasta Burguete, donde nos alojamos esta noche.
En el Alto de Ibañeta hay un monolito en memoria de Roldan, personaje histórico que murió en Roncesvalles en el año 778 cuando, yendo al mando de la retaguardia del ejercito de Carlomagno, fue atacado por los vascones. La leyenda "Chanson de Roland" transformó esta escaramuza en una gran batalla, en la que son "sarracenos" y no vascones, los que atacan a la retaguardia de Carlomagno. La batalla es desfavorable a las tropas francas de las que solo resisten el arzobispo Turpin, el prudente Oliveros y el valeroso Roldan. Este toca su olifante pidiendo ayuda a su señor. Los infieles matan a Turpin y Oliveros. Roldan, sintiendo próxima su muerte, intenta quebrar su espada "Durandart" contra una roca. Pero es la roca la que se quiebra (de ahí el Monolito) Cuando finalmente muere, mientras Dios lleva su alma al cielo, se oyen los clarines del ejercito imperial que regresa al oír su llamada y derrota a los infieles.
En el alto nos reciben la niebla y una fría llovizna. Tras unas fotos junto al monumento conmemorativo de la batalla de Roncesvalles, descendemos por la carretera hasta la localidad de Roncesvalles.
El Monasterio y Hospital de Nuestra Señora de Roncesvalles fueron fundados originalmente en 1132. La Colegiata restaurada en un armónico gótico francés, conserva en su sala capitular las tumbas del rey Sancho el Fuerte de Navarra y la de su esposa Clemencia, la tumba reproduce la gigantesca estatura del rey (2.25 mts) lo que hace suponer a sus biógrafos que sufría alguna alteración endocrinológica.
Nada mas salir de Roncesvalles, cogemos el "Camino" que discurre paralelo a la carretera por un bonito sendero entre arboles, hasta que llega al cuartel de la guardia civil justo a la entrada de Burguete, donde nos alojamos en el Hostal Loio, asentado en un bonito caserón navarro.
Salimos de Burguete a las 8 de la mañana y por un camino entre prados llegamos hasta El Espinal, atravesamos este pueblo por su calle principal y a la altura de la Casa Auñamendi cogimos un camino que en constante ascenso nos lleva al alto de Meizquiriz, cruzamos la carretera y al otro lado de la misma retomamos el sendero que, atravesando un frondoso bosque, nos lleva hasta cerca de Viscarret. En este tramo sufrimos el primer y único pinchazo de todo el recorrido.
El camino llega hasta la carretera y pronto la abandona para seguir a la derecha, hacia Lizoain. A la salida de esta población se inicia el ascenso hasta el puerto de Erro.
Allí, precisamente, en las proximidades de donde el viejo camino peregrino vuelve a cruzar la carretera, hay tumbadas en el suelo tres enormes losas. La gente las llama "Los Pasos de Roldan" y, según la leyenda popular, la más grande marca la longitud del paso del héroe, la mediana la de su mujer y la más pequeña la de su hijo.
Una vez cruzada la carretera en el alto de Erro, da comienzo una bajada técnica y peligrosa aunque muy divertida, que por un camino empedrado nos lleva hasta Zubiri.
En Zubiri (pueblo del puente en euskera), existe un puente de piedra sobre el río Arga, conocido como el puente de la Rabia, pues según la tradición los animales afectados por esta enfermedad se curaban pasando bajo sus arcadas.
Desde Zubiri seguimos el camino con el río Arga siempre a nuestra derecha, pasando por Ilarraz y Larrasoaña para llegar a Zuriain. Aquí cogimos la carretera y tras pasar Zabaldika, en vez de ir hacia Nuestra Señora de Arre como estaba previsto, nos equivocamos y entramos en Pamplona por una ronda de circunvalación, esto nos impidió entrar en Pamplona por donde va el Camino: atravesando el río Arga por el puente medieval de la Magdalena, para ascender hacia las murallas, y franquearlas por el portal de Francia y llegar a la Catedral.
La Catedral de Pamplona de primitiva construcción románica fue destruida en 1390 por un incendio, se reconstruyó en estilo gótico siguiendo la pauta del bello claustro que se había acabado en 1356. Ante el deterioro de sus elementos decorativos externos en el siglo XVIII se encargó a Ventura Rodríguez el diseño de la fachada neoclásica que hoy contemplamos.
Dentro del Templo destaca el Mausoleo de Carlos III y Leonor de Trastámara, espléndido ejemplo de la escultura gótica del siglo XV, que reproduce las verdaderas caras de los monarcas.
Después de cruzar Pamplona, subimos por carretera hasta Cizur Menor, villa a la que llegamos a eso de las 2 de la tarde y en donde paramos a comer.
En Cizur Menor se alza la iglesia románica de San Miguel Arcángel perteneciente al antiguo monasterio de la orden de los hospitaleros
Después de la comida reanudamos la marcha subiendo por pistas y caminos hasta el alto del Perdón, la ascensión se hace dura e incluso el ultimo tramo lo hacemos a pie.
Casi llegando al alto del Perdón, a la izquierda del camino, está la Fuente de la Reniega, en la que según la tradición el diablo invitaba a los peregrinos sedientos a renegar de Dios, de María y de Santiago, para poder beber.
Desde el alto, donde hay una estación eólica y unos curiosos "peregrinos de metal", podemos contemplar una magnifica vista de la cuenca de Pamplona. El descenso se hace por un camino lleno de piedras que nos obliga a poner pie a tierra en el primer tramo. Luego, ya en la bicicleta, llegamos a Uterga. Aquí nos despistamos y cada uno llega a Puente La Reina por un camino diferente, de todas formas en el famoso puente de esta localidad nos reunimos los tres y el equipo de apoyo que nos traslada a Logroño donde dormiremos esta noche.
Puente la Reina, "donde todos los caminos a Santiago se hacen uno solo", debe su nombre a su famoso puente, "La linda puente" del Codex Calixtinus, el más equilibrado y majestuoso puente de las rutas compostelanas.
Entre los muchos monumento e imágenes señeras de Puente la Reina, cabe reseñar la imagen de la Virgen del Puente, que ahora está custodiada en la iglesia de San Pedro, pero que durante siglos estuvo en una hornacina del puente sobre el río Arga. En torno a esta imagen nació una leyenda: Era el caso que, coincidiendo siempre con acontecimientos que habían de suceder después, cierto pajarillo, "el pájaro Txori", como fue conocido desde siempre, hacía su aparición y ayudándose del pico para arrancar la suciedad y de las alas para quitar el polvo, dejaba la Virgen limpia y reluciente y a os lugareños atemorizados, pues tras cada aparición del Pájaro Txori, siempre sucedía alguna desgracia: batallas, sequías, epidemias...
Como pernoctamos en Logroño, el coche de apoyo nos ha de llevar hasta la salida de etapa en Puente La Reina. Salimos a las 9 de la mañana...
De entrada el camino discurre entre cerros y barrancos, por lo que este tramo lo hacemos a pie. Poco después el sendero mejora, así que, ya en bicicleta, cruzamos Mañeru y llegamos hasta Cirauqui. Ascendemos a lo alto del pueblo, pasando en primer lugar bajo un bonito arco ojival y bajo una casona medieval después, luego descendemos por una calzada romana y atravesamos un barranco por un puente también de origen romano, que está recién restaurado. Poco después cruzamos la carretera N-111 y por cómodas pistas llegamos hasta Lorca primero y Villatuerta después, aquí tomamos la carretera y por ella llegamos a Estella a eso de las 11 de la mañana. Aquí paramos para almorzar...
La ciudad de Estella (Lizarra en euskera, que significa estrella) fue fundada por Sancho Ramírez en el año 1.085, según la tradición en el lugar donde se apareció la Virgen del Puy, patrona de la villa.
En Estella se celebra su patrono San Andrés, el primer domingo de Agosto (cuando este santo es el 30 de Noviembre), este hecho se basa en una curiosa tradición que data del año 1625: en ese año el consejo de notables de la ciudad votó el patronazgo de San Andrés y la traslación de la fiesta.
El domingo 2 de Agosto del año 1626 (que era el primero en que se celebraba la fiesta trasladada), ocurrió un hecho prodigioso que confirmo que el cielo aprobaba el patronato y su traslación de fecha, así lo narran las crónicas de la época:
Desde Irache seguimos ascendiendo por pistas hasta Azqueta, pasada esta localidad una fuerte subida nos lleva hasta Villamayor en cuya entrada hay una curiosa fuente medieval "La Fuente de los Moros". Pasado Villamayor una pista de tierra en buen estado nos lleva hasta los Arcos primero y Sansol después. Luego ya por carretera cruzamos la localidad de Torres del Río.
En Torres del Río se erige majestuosa la iglesia del Santo Sepulcro, una de las joyas arquitectónicas del Camino, que con su planta octogonal evoca al templo de Jerusalén y a sus enigmáticos Caballeros Templarios.
Desde Torres del Río siguiendo la carretera se asciende a un pequeño puerto desde cuya cima descendemos hasta Viana
Viana vieja ciudad amurallada, fue fundada en el año 1219 por Sancho VII el Fuerte. En el atrio de su grandiosa Colegiata de Santa María, están enterrados los restos de uno de los personajes mas atractivos del Renacimiento: Cesar Borgia, muerto no lejos de aquí, el 3 de Marzo de 1507 en la batalla de Mendavia.
De Viana seguimos la carretera un tramo, luego tomamos una pista que pasa junto a la ermita de la Virgen de las Cuevas, vuelve a cruzar la carretera, bordea el cerro Cantabria y nos deja en el famoso puente de piedra sobre el río Ebro a la entrada de Logroño. Son las 5 de la tarde y para concluir la etapa nos acercamos hasta el hotel en bicicleta.
El actual puente de piedra, fue levantado a finales del siglo pasado y sustituyo al puente medieval que mando construir Alfonso VI y que llegó a tener doce arcos y tres torres defensivas. De la importancia estratégica de este puente en el Camino de Santiago nos da una idea el hecho de que fue reparado primero por Santo Domingo de la Calzada y después por su discípulo San Juan de Ortega.
Desde Logroño, ciudad en la que hemos dormido, salimos a las 9 de la mañana atravesando la ciudad a través de un bonito parque que rodea el pantano de la Grajera y alcanzamos el alto del mismo nombre, desde el que descendemos hasta Navarrete, donde almorzamos en un bar junto al albergue de peregrinos. Después del almuerzo, por carretera primero y por cómodas pistas después, llegamos a Najera cuando comienza a llover.
Najera, en árabe "lugar entre peñas", fue reconquistada en el año 923 por leoneses y navarros. En el siglo XI Sancho "el Mayor" la convirtió en la capital de Navarra. Su hijo Don García, el gran rey Najerense, fundo en el año 1.052 el Monasterio de Santa María la Real, la mejor joya de la ciudad.
En Najera es famosa la leyenda del gigante Ferragut:
Santo Domingo de la Calzada fue fundado por el Santo del mismo nombre. Nacido en Viloria (Burgos), fue llevado a los Monasterios de San Millan de la Cogolla y de Valvanera donde fue rechazado por su torpeza; entonces se hizo ermitaño y conoció a Gregorio Ostiense que le trasmitió su sabiduría. Se instaló en un lugar llamado Hoyuela y con la ayuda de una hoz taló arboles, desecó lagunas, encauzó el río y construyó la calzada peregrina y el puente sobre le río Oja, así como el hospital de peregrinos donde hoy asienta la ciudad. En la catedral de Santo Domingo de la Calzada, hay una cripta con el sarcófago que contiene los restos del santo. Sobre este sarcófago se encuentra un templete que representa escenas de la vida del santo y en la reja que lo rodea, figura mellada la mágica hoz que tantos bosques deforestó.
Frente al sepulcro hay un gallinero, con un gallo y una gallina vivos, que rememoran el mas famoso milagro del santo :
La manceba, trocando su amor por venganza, introdujo una copa de plata en la valija del peregrino.
Ya en ruta, la justicia encontró la copa y condeno al joven a la horca. Los padres llegaron a Compostela y rezaron por la salvación de su hijo ante el Apóstol. A su vuelta lo encontraron ahorcado, pero vivo gracias a la intercesión de Santiago. Cuando van a contar el milagro al juez, este está a punto de cenar un gallo y una gallina y les dice - vuestro hijo está vivo igual que estas aves - en ese momento, los pájaros saltaron del plato y cantaron"
Desde entonces el dicho popular reza:
Belorado tiene como patrón a San Vítores, al que se representa decapitado y con la cabeza bajo el brazo, pues según la tradición tras ser degollado por los sarracenos , tomó su cabeza y sobrevivió tres días con sus noches hasta que derrotó a los infieles.
A Belorado viene a recogernos el equipo de apoyo para llevarnos hasta Castrojeriz que es donde pernoctamos. En el coche de apoyo viene Joaquín, que con su familia ha llegado en tren hasta Burgos para incorporarse mañana al recorrido.
Desde Castrojeriz donde hemos dormido, nuestro impagable equipo de apoyo nos devuelve a Belorado para iniciar la etapa a las 9.30 de la mañana, con un nuevo "peregrino": Joaquín.
Tras cruzar el puente sobre el río Tirón, por un camino de tierra llegamos hasta Tosantos y Villambistia, desde allí tras cruzar la carretera, alcanzamos Villafranca de Montes de Oca.
Aquí en Villafranca comienza el ascenso a los Montes de Oca, inicio según el "Codex Calixtinus" de la "tierra de españoles" por ser uno de los limites históricos entre Castilla y Navarra, tal y como refleja una coplilla popular :
San Juan de Ortega nació en el año 1.080. Fue ordenado sacerdote en Nájera y allí conoció a Santo Domingo de la Calzada con quien colaboró hasta su muerte en 1109.
Sabedor de las dificultades que sufrían los peregrinos a su paso por los Montes de Oca, debido a lo quebrado del terreno y a la cantidad de bandoleros que en ellos se ocultaban, decide edificar en el lugar de Urtica (Ortega,) una comunidad con hospital.
Además construyo las calzadas y puentes de la zona y desecó el área pantanosa entre Ages y Atapuerca, todo ello hasta su muerte en 1163.
El Santuario de San Juan de Ortega es un lugar acogedor y apacible, en el que 2 días al año, en torno a los equinoccios de primavera y otoño (21 de Marzo y 21 de Septiembre), se produce un insólito fenómeno con múltiples y místicas interpretaciones. Así lo describe un apasionado historiador burgalés:
En la planicie que se extiende entre Ages y Atapuerca, en el lugar donde se produjo la batalla de Atapuerca, hay un menhir conocido como Fin de Rey, que conmemora el lugar donde las tropas de Fernando de Castilla mataron al hermano de éste, García el de Nájera, en el año de 1.054. En el Menhir hay una inscripción que dice "Fin de Rey. García de Najera"
Desde Atapuerca seguimos por carretera hasta Burgos, aquí hacemos una parada para ver su famosa catedral.
Burgos fue fundada en al año 884 por el Conde Diego Rodríguez Porcelos y debe su nombre a las torres defensivas, "burgos", del cerro bajo en el que fue fundada.
La catedral Metropolitana de Santa María, es una magnifica obra gótica iniciada en el 1221 por Fernando III el Santo y consagrada en el 1260, aunque las obras no concluyeron hasta el siglo XVI. Desde sus emblemáticas torres, hasta el sepulcro del Cid, sito en el crucero, todo en ella es grandioso, artística e históricamente.
Saliendo de Burgos nos topamos con tres peregrinos que hacen el camino a pie como todos, aunque estos llevan cada uno un dromedario cogidito por las riendas, en fin... !hay gente pa to!.
Nosotros aunque todavía alucinamos un poco por tan curioso encuentro, seguimos por pistas de tierra, primero hasta Tardajos y luego hasta Rabé de las Calzadas.
En época medieval el trayecto entre Tardajos y Rabé, a través del río Urbel, era una zona pantanosa de difícil transito, lo que dio origen a un dicho:
Desde Rabe de las Calzadas ascendemos al páramo burgalés, lo atravesamos por una pedregosa pista y bajo un sol de justicia, la pista acaba en un brusco descenso: la Cuesta de Matamulos.
La senda nos conduce hasta Hornillos del Camino. Secos como la mojama vamos como flechas al único bar del pueblo, está cerrado, el dueño está dentro pero el muy cazurro dice que no abre hasta las cinco, aunque además de nosotros cuatro, hay en la puerta siete u ocho sedientos peregrinos más.
En fin, en vista del éxito seguimos nuestro camino, que vuelve a subir al páramo y lo vuelve a cruzar por una larga pista que el calor hace interminable. Cuando ya la moral flaquea, la pista empieza a bajar repentinamente hasta una depresión del terreno, donde aparece como por encanto el siguiente pueblo, Hontanas. Aquí el bar esta abierto, así que bocatas y cervecitas, por fin...
Después de repostar en Hontanas salimos hacia Castrojeriz a eso de la seis de la tarde, primero vamos por un sendero (en el que Joaquín cae en un zarzal - dos días después aún se sacaba espinitas- y luego por una cuidada carretera local, que pasa por debajo del arco del convento de San Antón.
En las ruinas del convento de San Antón, se conserva aún un magnifico rosetón en el que destacan las cruces en Tau como emblema de la orden de los Antonianos, cien años antes de que lo fueran de los templarios. La memoria de esta orden se sitúa entre la historia y la leyenda:
Pasadas las ruinas del convento de San Antón, siguiendo la misma carretera por la que veníamos y en poco menos de 20 minutos, llegamos a Castrojeriz a eso de las siete de la tarde.
Castrojeriz fue fundada entre los siglos IX y X, siendo Sigerico el rey godo de la época (Castrun Sigerici). Su fortaleza en lo alto de un cerro tuvo vital importancia en los primeros tiempos de la reconquista. Además de la fortaleza (hoy en ruinas) en esta villa destacan otros monumentos como la Colegiata de la Virgen del Manzano (originariamente construida en el siglo XIII, aunque el templo actual data del siglo XVIII); y la Iglesia de San Juan y la Iglesia de Santo Domingo.
Cerca de Castrojeriz, aunque fuera de la ruta Jacobea, esta la población de Villasandino, cuna del poeta pícaro Antonio Alvarez algunos de cuyos versos no me resisto a reseñar :
Salimos de Castrojeriz a las 8.30 horas de la mañana, una vez descansados y repuestos para continuar el Camino. Enseguida hay que subir hasta el Alto de Mostelares, corta pero intensa subida, que va seguida de una larga bajada hasta la Fuente del Piojo, pasada ésta cruzamos el río Pisuerga y llegamos a Itero de la Vega.
El puente de Itero por el que se atraviesa el río Pisuerga, es un majestuoso puente románico de once ojos, mandado construir por Alfonso VI aunque en la actualidad esta muy remodelado.
Desde Itero de la Vega subimos por una buena pista hasta el alto del Paso Largo desde el que descendemos hasta Boadilla del Camino.
En Boadilla del Camino merece destacarse la Iglesia Parroquial de la Asunción, que data del siglo XVI. Detrás de la iglesia se puede admirar un bello rollo jurisdiccional del siglo XV de estilo gótico tardío.
A partir de Boadilla seguimos una pista que va paralela al Canal de Castilla, y acaba cruzándolo por unas curiosas esclusas , ya en la entrada de Fromista.
El Canal de Castilla es una importante obra de ingeniería del siglo XVIII, fruto de la política ilustrada del Marques de la Ensenada, que tenia una triple finalidad : riego, transporte de grano, y molición del mismo.
En Fromista destaca la amosísima Iglesia de San Martín, fundada por Dª Mayor de Castilla, viuda de Sancho III de Navarra, en el 1.066. Es una de las obras cumbre del románico, que penetró en España por el Camino de Santiago. En ella destaca la perfección de los motivos ornamentales: los capiteles en el interior y la increíble sarta de 315 canecillos que recorren todo el alero de los tejados en el exterior. En 1.893 sufrió, nunca mejor dicho sufrir, una controvertida restauración, cuyas huellas afortunadamente se van borrando con los años.
En Fromista paramos a almorzar y coincidimos con el equipo de apoyo. Tras el merecido descanso continuamos por una pista de tierra paralela a la carretera, que nos conduce hasta Carrión de los Condes, a donde llegamos a eso de las 13 horas.
Carrión de los Condes fue la ciudad mas importante de su territorio durante la reconquista, llamada Solar de los Beni-Gome y situada entre los ríos Cea y Pisuerga, sus palacios y murallas pertenecieron a la poderosa familia leonesa. El Poema del Mío Cid (de inspiración castellanista y sin fundamento histórico) hace de ellos, como "Condes de Carrión, los ridículos antihéroes, yernos del héroe castellano Rodrigo Díaz de Vivar: "El Cid Campeador".
En Carrión de los Condes, hay numerosos monumentos históricos como el convento de Santa Clara, la Iglesia de Santa María del Camino y la Iglesia de Santiago, de esta última se conserva la fachada occidental del siglo XII donde destaca un maravilloso Pantocrator, obra cumbre del Románico.
Una vez atravesado Carrión, tomamos una carretera que nos lleva hasta las ruinas de la abadía de Belvedere. Desde allí, por una antigua calzada romana que se ha convertido en una pedregosa pista, hacemos 16 interminables Kilómetros hasta Calzadilla de la Cueza. Después tomamos una carretera comarcal y llegamos hasta Ledigos y desde allí, de nuevo por pistas, vamos hasta Terradillos de los Templarios y San Nicolás del Real Camino.
Tanto en Terradillos como en San Nicolás, hay una constante evocación a los templarios, aunque no existan pruebas materiales, ni documentales, que atestigüen la presencia en estos lugares de los "frailes guerreros".
Desde San Nicolás del Real Camino seguimos una zigzagueante pista que nos lleva hasta la carretera nacional 120, por la que llegamos hasta Sahagún, en cuya estación de FF.CC. nos ha de recoger el equipo de apoyo. Son las 17 horas.
Sahagún (antes San Facund) es una villa desordenada y con un presente poco acorde con su grandioso pasado.
Aquí fueron martirizados San Facundo y San Primitivo; en el lugar de su enterramiento, se erigió un monasterio, en el que fue educado Alfonso VI. Este monasterio se convirtió en la cabeza del Cluny en España a partir del año 1068.
En el siglo XV los Reyes Católicos potenciaron San Benito de Valladolid, abadía de la que pasó a depender SAHAGÚN, perdiendo sus privilegios e importancia. Con todo, todavía en el siglo XVIII mantenía un floreciente estudio universitario.
Tras la desamortización de Mendizabal en el siglo XIX y el incendio que asolo la abadía , Sahagun entró en su definitiva decadencia.
Hoy, de la Abadía queda la torre del siglo XIX y la capilla de San Mauricio (siglos XII- XIII).
Otra vez nuestro fiel equipo de apoyo nos deja a las 9.30 en Sahagún para iniciar la etapa. Salimos de la ciudad por el "Puente del Canto" y por carretera alcanzamos la próxima localidad: Calzada del Coto.
Este puente lo mandó construir Alfonso VI en el año 1.085 y hasta el año 1992 fue el único puente de Sahagún.
En Calzada del Coto cogemos una pista flanqueada por pequeños arboles que tras 12 kilómetros nos deja en el Burgo Ranero. Esta pista habilitada en el año 1991 por la junta de Castilla y León va paralela al Real Camino Francés, que hoy en día se confunde con la carretera.
El Burgo Ranero está rodeado de pequeñas charcas que en invierno se rebosan y hacen difícil el transito. Ellas y la cantidad de ranas que las pueblan debieron de dar al pueblo su curioso nombre.
Pasado el Burgo Ranero, volvemos a la aburrida pista arbolada que tras 14 kms. nos lleva hasta Reliegos, desde aquí volvemos a la carretera y nos vamos hasta Mansilla de las Mulas, a donde llegamos a las 11.30 horas y paramos para almorzar. Hemos hecho 36 kms. en 2 horas por una pista prácticamente recta: un muermo.
El carácter caminero de la localidad de Reliegos se refleja muy bien en la letrilla popular: "La legua de Castilla de Reliegos a Mansilla". Efectivamente, a una legua (5.572 mts.) de Reliegos está Mansilla de las Mulas, una histórica villa fundada en el 1181 por el Rey Fernando II que tenia unas murallas de cal y canto de las que poco queda. A 15 Kilómetros de Mansilla está San Miguel de la Escalada, la más armónica de las iglesias mozárabes españolas.
Salimos de Mansilla por su famoso puente medieval sobre el río Esla y por carretera llegamos hasta Puente de Villarente, aquí dejamos la carretera y por caminos de tierra llegamos a Valdelafuente primero y al alto del Portillo después. Desde el alto bajamos por cartera hasta León por donde callejeamos hasta llegar a su famosa Catedral : "La Pulcra Leonina".
León nació como guarnición militar, en este caso como "castro" de la Legión Gemina, creada por Galba con contingentes hispanos en el año 69 D.C.
Conquistada por Muza, fue reconquistada por Alfonso I en el Siglo VIII. Ordoño II en el año 915 la convirtió en la capital del reino astur-leones. Arrasada por Almanzor en 988, Alfonso V la volvió a reconstruir. Durante los siglos XI y XII fue la capital mas importante de la España cristiana, hasta que en siglo XIII la unión definitiva de los reinos de Castilla y León le lizo perder la capitalidad.
Dentro del enorme tesoro monumental de León cabe destacar la Catedral de Santa María de la Regla, obra maestra del gótico español, que empezó a construirse en el siglo XII. En su interior maravillan los mas de 100 ventanales y las vidrieras que los cierran.
Otros monumentos leoneses de interés son:
A eso de las siete de la tarde llega al hotel Ángel que ha hecho el camino desde Fresnedillas de la Oliva en solitario. Ya por la noche también se incorporan a la "troupe "David y familia que acompañaran al equipo de apoyo.
A las 8.30 de la mañana salimos de Villadangos. Por una pista de tierra paralela a la carretera llegamos hasta Hospital de Orbigo, aquí cruzamos el famoso puente medieval sobre el río Orbigo, llamado "passo honroso" debido a un episodio mitad historia mitad leyenda que aquí ocurrió en el año compostelano de 1434.
El caballero Don Suero Quiñones declarose en prisión de amor por cierta dama y poniendo al Apóstol Santiago como testigo, concertó como rescate de su prisión el romper hasta 300 lanzas de aquellos caballeros que osaran pasar por el puente.
Durante 30 días el caballero leonés y los suyos derrotaron a caballeros franceses, italianos, alemanes, portugueses y castellanos. Terminada la justa fueron en romería a Compostela donde Don Suero, en agradecimiento al Apóstol, donó un brazalete de oro de su dama. Este brazalete se identifica con el collar que luce el busto relicario de Santiago, que se conserva en la capilla de reliquias de la catedral de Santiago de Compostela.
Desde Hospital de Orbigo por carretera primero y por caminos después, llegamos a San Justo de la Vega y a Astorga.
Astorga, la Asturica Augusta de los romanos, está marcada por su carácter de encrucijada de vías: allí se cruzaban la Vía Trajana (Burdigala-Asturica) con la Vía de la Plata (Emerita Augusta- Asturica), dos de las más importantes vías de la red de calzadas romanas.
La catedral de Santa María de estilo gótico (año 1471) y el Palacio Episcopal, que es obra de Gaudí (1899-1913), son los monumentos más emblemáticos de esta ciudad.
Al poco de salir de Astorga llegamos a Murias de Rechivaldo donde almorzamos en un garito donde, tanto los bocatas como los carajillos son gigantes, doy fe. Después por una pista de tierra en continuo ascenso y bajo un sol de justicia llegamos hasta El Ganso. Pasada esta localidad tomamos la carretera que continúa subiendo hasta Rabanal del Camino.
Rabanal del Camino hoy en franca decadencia, en tiempos fue una importante localidad jacobea, prueba de ello son las diversas iglesias y hospitales que recuerdan su antiguo esplendor: Ermita de Veracruz, Ermita de San José, Parroquia de Santa María y Hospital de San Gregorio.
Cruzamos Rabanal y por un estrecho sendero alcanzamos de nuevo la carretera. Por ella alcanzamos primero Foncebadón ascendiendo constantemente y coronamos después el monte Irago: el lugar de mayor altitud de la ruta jacobea, tras una dura subida. Allí se levanta la famosa Cruz de Ferro (1.517 mts), uno de los monumentos mas emblemáticos del Camino.
En tiempos de los romanos había en este lugar un altar al Dios Mercurio, protector de los caminantes, al que los viajeros dejaban un guijarro a modo de óbolo. Siglos más tarde con la explosión jacobea se alzó aquí el mas modesto de los cruceros del camino: una sencilla cruz de hierro, clavada en un trocó pelado, de 5 metros de altura, que se sustenta en un montón de piedras. Cada peregrino deja una piedra en el inmenso montón para pedirle al apóstol su protección en el camino, cumpliendo así una tradición milenaria, antes pagana y ahora cristiana.
Desde la cruz de hierro, la carretera en ligero descenso nos lleva hasta Manjarin, lugar desolado donde hay un destartalado chamizo al cuidado de un curioso hospedero que se autoproclama templario y que da la bienvenida a cada peregrino haciendo sonar una estridente campana. Aquí hacemos una larga parada para tomar unas cervecitas y reagruparnos.
Sobre las 16 horas reanudamos la marcha siguiendo la carretera, que tras un pequeño repecho inicia un vertiginoso descenso de unos 15 Kilómetros, el cual nos conduce a Molinaseca. Luego seguimos hasta Ponferrada, adonde llegamos a las 17.30 horas para que nos pase a recoger el coche de apoyo.
La etapa ha sido muy dura, Joaquín tiene problemas en las rodillas y ha sufrido de lo lindo en el día de hoy.
Ponferrada (Pons Ferratus) comenzó a ser importante en el siglo XII gracias al puente sobre le río Sil (reforzado con hierro) que ordeno levantar el Obispo de Astorga : Osmundo.
En ésta localidades se alza el impresionante castillo de los Templarios, testimonio soberbio de la que fue la presencia en esta región de la controvertida orden. Levantado en un lugar prominente a orillas del río Sil, es uno de los ejemplos más hermosos de la arquitectura militar en España.
Para evitarnos el lío de carreteras que hay a la salida de Ponferrada, decidimos neutralizar los primeros 9 Kilómetros de la etapa de hoy, de forma que el coche de apoyo nos dejo en Camponarraya, en lugar de en Ponferrada. Desde esta población comenzamos la etapa del día a eso de 9.30 horas.
Por buenas pistas de tierra, entre viñedos llegamos enseguida a Cacabelos y, más tarde, alternando tramos de carretera con tramos de pista, llegamos a Villafranca del Bierzo.
Villafranca del Bierzo es una ciudad que nació y creció gracias al camino de Santiago. Antes de entrar en la Villa, se pasa por la Iglesia de Santiago, Templo románico de una sola nave, famoso por su puerta del perdón, en la que por un privilegio del papa español Calixto II (1455-1458) los peregrinos imposibilitados , que no podían llegar a Compostela, podían ganar aquí el jubileo como si hubieran llegado.
Una vez en la villa son monumentos de interés, el Castillo de los Marqueses de Villafranca (Siglo XII) y la Colegiata de Santa María de Cruñego, que data del 1529 y que fue erigida según planos de Gil de Hontañon.
Desde Villafranca hasta Ambasmestas son 13 Kilómetros que hacemos rápidamente por la carretera N-VI que esta en obras y con abundante tráfico.
Ambasmestas está situada justo en el punto donde el río Balboa desemboca en el río Valcarce, el topónimo del pueblo eso significa: "lugar donde se mezclan dos corrientes de agua".
Pasado Ambasmestas seguimos en continua subida hasta Herrerías, aquí paramos a repostar en el bar de turno, luego reemprendemos la marcha para hacer los 7 Kilómetros mas duros de todo el camino, que son sin duda los que van desde Herrerías hasta O Cebreiro, tanto por el desnivel (500 metros en 7 Kilómetros) como por el calor asfixiante que nos agobia durante la ascensión.
Una vez en O Cebreiro paramos para comer y reagruparnos.
O Cebreiro es otro de los lugares emblemáticos del Camino, situado a 1293 metros de altitud aquí destaca el primitivo templo de Santa María la Real, de estilo prerománico, en cuyo interior se venera la hermosa imagen románica de Santa María La Real y el cáliz y patena del siglo XII que conmemoran el famoso milagro del Cebreiro:
Próximo a Tricastela, en un cerrado valle sorprende la mole del Monasterio de Samos, símbolo de la cultura gallega.
Fundado en el siglo VI por San Martín, una lápida visigoda del siglo siguiente confirma tal antigüedad. Entre los pocos retos medievales que quedan hay que citar la pequeña capilla mozárabe del Salvador o del Ciprés (Siglo IX).
El conjunto arquitectónico actual es de los siglos XVI al XVIII con estilos renacentista y barroco. Dentro del conjunto destacan el claustro de Feijoo (Siglo XVIII) presidido por una estatua del ilustre polígrafo benedictino que tomó aquí los hábitos en el año 1.688 y el claustro de las Nereidas (Siglo XVI) entre cuyas dependencias se encuentra el refectorio y la maravillosa biblioteca.
Dejamos el Monasterio de Samos siguiendo por la carretera y ascendemos al pequeño Alto de Riocabo. No es una subida fuerte, pero se nos atraganta: seguramente por el cansancio que llevamos acumulado durante la etapa.
Por fin llegamos a Sarria y en el hotel donde nos alojamos nos reunimos con el equipo de apoyo y con Rafa y su familia, cenamos todos juntos en el hotel, ya empezamos a olfatear el final del camino y hay cierta euforia durante la cena.
A eso de las ocho de la mañana salimos de Sarria cruzando el río Celeiro por la "Ponte Áspera", nada mas salir comienza a caer una lluvia que nos acompaña en un bonito recorrido entre bosques. Pasamos por delante de la casa rural donde se alojan David y familia que han puesto una pancarta en el camino para animarnos.
Enseguida llegamos a Barbadelo donde el camino pasa junto a la a la parroquia de Santiago, que es un notable ejemplo del románico gallego. Después alternando pistas asfaltadas en buen estado, con pedregosos caminos en los que hay que apearse de la burra, llegamos hasta Brea primero y Portomarín después. En esta última localidad paramos para almorzar a eso de las 10.30 horas.
Portomarín proclama con su nombre la importancia que siempre tuvo este paso sobre el río Miño. Parece que el puente original era romano y que fue destruido en las guerras entre Doña Urraca y su marido Alfonso "el batallador". De su reconstrucción se ocupó Pedro "el peregrino" y quedo con el nombre de Puente Miño, hasta que en 1944 se lo tragó el embalse de Belesar. El pueblo, engullido también por las aguas, fue construido de nuevo en el alto adonde se trasladaron la portada de la Iglesia de San Pedro y la Iglesia de San Nicolás.
Esta Iglesia de San Nicolás (antes de San Juan) es una impresionante mole, mitad Iglesia y mitad fortaleza, en cuyo interior se percibe una sensación inhabitual: es la luz, que no se corresponde con las normas comunes de los templos cristianos. En efecto, el edificio al ser trasladado no se volvió a levantar según el canon que obliga a que los templos tengan el ábside hacia Oriente (Jerusalén) y la fachada principal hacia Poniente (Finisterre), por ese motivo dentro de este templo, la luz se percibe de forma extraña respecto a otras iglesias. Se trata pues de una Iglesia "desorientada".
Desde Portomarín por la carretera, y por un andadero paralelo a ella ascendemos hasta Ventas de Narón, desde donde se desciende hasta Palas de Rei.
En el termino municipal de Palas de Rei, aunque apartado del Camino de Santiago, está el pueblo de Vilar de Donas donde se encuentra una de las más famosas iglesias románicas gallegas: la parroquia de San Salvador, de la que empieza a haber datos en el año 1.184, cuando pasa a depender de los Caballeros de la Orden de Santiago y se convierte en el lugar oficial de enterramiento de los mismos en Galicia.
A partir de Palas de Rei comienza un tramo precioso del recorrido, que por buenos caminos entre bosques con continuas subidas y bajadas, nos lleva primero a San Xulian y después hasta Melide. Aquí nos despistamos, Javier y Jorge siguen por el camino hasta Arzúa, yo sigo el camino hasta Boente desde donde cojo la carretera hasta Arzúa, Ángel que anda rezagado a causa de una enorme pájara, sigue el mismo camino y finalmente Joaquín, que sigue sufriendo con sus rodillas, hace todo el recorrido desde Palas hasta arzúa por carretera. A pesar de la desbandada general, en Arzúa nos reunimos todos y juntos esperamos al coche de apoyo, que nos recoge a las 18 h. para devolvernos a nuestro hotel en sarria.
Ultima etapa. Desde Sarria el coche nos lleva hasta Arzúa, donde acabamos ayer y desde donde salimos hoy las 9.30 horas. Por caminos bien sombreados, llegamos hasta Arca, desde allí Ángel, Javi, Joan Lluis y yo seguimos un camino forestal, que dejando a la izquierda el aeropuerto de Lavacolla, sube hasta la carretera N-544, en la que nos reunimos con Joaquín, Jorge y Pere que la han seguido desde Arca. Una vez todos juntos bajamos hasta el pueblo de Lavacolla donde almorzamos.
Lavacolla es un nombre que tiene su historia:
En la plaza del Obradoiro destaca la catedral. Mirándola de frente, a la izquierda queda el Hostal de los Reyes Católicos, espléndido hospital de peregrinos, fundado en 1492. A la derecha queda el colegio de San Jerónimo, fundado por el arzobispo Fonseca (1.507). A nuestra espalda queda el imponente palacio de Rajoy, obra neoclásica que hoy es sede del Ayuntamiento y de la Xunta de Galicia.
En la Catedral la fachada del Obradoiro, inaugurada en 1.750, es obra del arquitecto gallego Fernando de Casas y Novoa. La actual fachada sustituyó a la antigua fachada románica y es una especie de cápsula protectora de la joya arquitectónica más valiosa de la catedral, cual es el Pórtico de la Gloria, que data del siglo XII y es la obra cumbre del románico español, construida por el Maestro Mateo. Conocidísimo es el parteluz de la entrada principal, sobre el que está la estatua de Santiago, que con gesto placido y sereno recibe al fatigado peregrino. La profundidad de las huellas de los cinco dedos de la mano derecha impresas sobre la dura piedra en secular rito, da idea de la cantidad de peregrinos que a lo largo de los siglos han completado la peregrinación a Santiago de Compostela.
Por fin nos reunimos todos los protagonistas de esta aventura: los ciclistas Antonio García, Joaquín Díaz, Javier Niu, Jorge Niu, Angel Vallverdú, Pere Bacú y Joan Lluis Cañellas; los caminantes Josep Mª Graño, Pepe Martinez; y el mejor equipo de apoyo del mundo, Carmen Fuertes, Elena Garcia, Ana Garcia, Celia Eirin, Andrea Diaz,Carmen Comino, Neus Lopez-Alberca, Gloria Hinojosa, Rosa Mª Abad, Pere Bascú (junior), Cristina Bascú , digno final para un precioso recorrido.